Nuestro Podcast

Escucha todos los episodios de Contigo en Cada Ciclo, podcast creado por
Elige Tus Ciclos,en nuestro sitio web y síguenos en los diferentes canales digitales. 

Contigo en Cada Ciclo

Contigo en cada Ciclo es un podcast donde encontrarás temas de interés para entender mejor los diferentes ciclos de nuestras vidas.

Encontrar un balance entre nuestra vida personal y profesional es un proceso que cada persona vive de diferente manera, a su ritmo y a su tiempo. Por ejemplo, es común encontrar obstáculos que dificultan llegar a sentirse plenamente realizada, especialmente en nuestro ciclo profesional.

Episodio 1: Contigo en Cada Ciclo.

Episodio 2: Contigo en Cada Ciclo.

En este episodio, Marian y Ale nos comparten sus experiencias de cómo han vivido su proceso de cambio del ciclo académico al profesional, y todas las nuevas experiencias que han afrontado.

Transcripción.

Marian:
¡Hola! ¿Cómo están?
Bienvenidos a Elige tu Ciclos yo soy Marian Galindo y el día de hoy, como siempre, nos estará acompañando una increíble persona, súper talentosa, con muchísima experiencia en podcast; nuestra productora y a quién tengo el orgullo de decir que es mi amiga de muchos años, Alejandra Mata.

Alejandra:

Muy feliz de estar aquí contigo Marian, de poder compartir este espacio que es Elige tus Ciclos y también de poderlo compartir con ustedes que nos están escuchando, de todas las herramientas, de todos los contenidos que esta campaña y este gran proyecto tiene para ustedes. Creo que antes de empezar a platicar ya más a fondo, es importante que les contemos ¿qué es Elige tus Ciclos?, ¿cómo surge?, ¿cómo ha estado creciendo? y bueno obviamente todo lo que tenemos preparado para todos los que nos están escuchando.

Marian:

Elige tus Ciclos es una campaña de responsabilidad social impulsada por Ferring Pharmaceuticals México, con el propósito de empoderar y concientizar a la mujer acerca de las herramientas con las que cuenta hoy en día para poder elegir libre y conscientemente lo mejor para ella.

Estamos en Instagram como @eligetusciclos, en Facebook como Elige tus Ciclos, donde podrán tener a la mano toda esta información de la que estamos hablando.

Para dar inicio, Ale me gustaría que nos contarás acerca de ti, ¿quién eres?, ¿qué fue lo que estudiaste?, ¿y qué es lo que te impulsado para llegar hasta dónde estás hoy en día?

Alejandra:

Pues yo estudié Arquitectura, yo me gradué hace 2 años, en 2018, bueno ya casi 3. Y pues bueno, al final yo me dediqué al área de marketing. Creo que a lo largo de mi carrera, pues no sé, es una carrera al final un poco, pues un poco que tienes que dedicarle mucho tiempo, tienes que tener muchísima paciencia, y pues creo que hubo mucho cosas que a lo mejor ya al final como que me encaminaron a dedicarme a área de marketing y no específicamente a la arquitectura.

A lo mejor, yo creo que es algo muy diferente a lo que tú estudiaste, yo estoy enterada que estudiaste Contaduría, me parece, y que igual acabamos las dos juntas en el área de marketing.

Marian:

(ríe)
Si, exacto. Creo que, bueno, es un poquito complicado decidir a una edad tan temprana, por ejemplo, lo que son, yo decidí mi carrera a los 17 años.

Alejandra:

Claro.

Marian:

Entonces decir exactamente, ¿qué es lo que quieres? ¿a qué te quieres dedicar? y prácticamente decidir el rumbo de tu vida pues es una decisión complicada, es una decisión difícil yo creo que para la mayoría de las personas. Pero pues aquí la idea es encontrar tu camino, ¿no?

Alejandra:

Claro.

Marian:

Encontrar hacia donde quieres ir, que es lo que quieres lograr y sobre todo que es lo que te apasiona, que es lo que te gusta.

Alejandra:

Si, claro. Incluso yo te diría que para mí incluso lo decidí desde antes, por ejemplo, yo recuerdo que antes de la universidad, en preparatoria nos dividían por como áreas.

Marian:

Claro, las áreas.

(ríe)

Alejandra:

Si, las famosísimas áreas.

Y yo me acuerdo que yo me enfoqué desde el principio al área que era matemáticas, arquitectura, todo eso y al final acabé en algo que es totalmente diferente de mi área pero pues incluso esa decisión para mí yo la tomé creo que a los 15 años.

O sea, yo recuerdo que tenía super claro así, yo quiero ser arquitecta.

Marian:

Aparte justamente en segundo de prepa es cuando te dan a elegir el área, que tienes que ya decir a que área te vas. Tienes las cuatro áreas y tú estas como de ¿qué hago?, ¿a qué me voy?

Tal vez tienes una idea en ese momento que es completamente diferente a lo que te vas a dedicar más adelante.

Alejandra:

Claro.

Y creo que es muy válido, o sea al final yo creo que, no sé, por ejemplo, a lo largo de mi carrera yo encontré el momento que yo decía: ya no sé qué quiero.

Y creo que no soy la única, a lo mejor tú que no estás oyendo, estás a lo mejor “ya no quiero mi carrera” y a mí me pasó, la verdad es que sí, hubo un momento que yo dije: “ya no quiero, a la mejor quiero otra cosa”, pero pues ya estaba más como, pues había puntos que si me gustaba, o sea como que tenía mis dudas, tenía muchísimas dudas. Al final digo, la terminé, terminé bien, pero pues sí, al momento como de dar ese pasito como de “ya acabé la carrera, tengo que trabajar”, como que no me convencía muchas cosas y era como “a lo mejor puedo intentar por otro caminito” y al final me fui por ese camino.

Marian:

Sí claro, o sea creo que todas las carreras como tal, traen diferentes retos.

Pero yo quería escuchar, por ejemplo, ¿cuál es el mayor reto al que te enfrentaste en tu carrera de arquitectura?

Alejandra:

Pues creo que fueron muchísimos, creo que hay unos muy específicos de la carrera, por ejemplo, como te comentaba una carrera que necesitas muchísima paciencia, muchísima dedicación, muchísima fuerza de voluntad para no dormir, porque era algo que era de que cada mes no dormíamos pues varias, varios días, o sea o que dormíamos muy poco.

Creo que esos retos pues como crecer y acostumbrarte a eso fueron unos. Obviamente también retos que, como te comentaba que yo creo que en todas las carreras experimentamos de que a lo mejor como: “uy, hoy ya no quiero, ya estoy harta, ya está entrega, este examen ya me tiene hasta el gorro, ya no quiero seguir”.

Creo que esos fueron los retos principales, pero de igual manera creo que ese ciclo de estar como en mi carrera también encontré pues mucha felicidad, encontré muchos amigos, conocí a personas nuevas, viví experiencias que la verdad no me arrepiento de haberlas vivido. Entonces creo que hubo retos pero que la misma parte, el mismo tiempo, encontré como muchísima felicidad en muchos otros aspectos, que pues al final encontré un balance en ese ciclo y que al final pues creo que eso te ayuda a seguir adelante.

Marian:

Claro.

Pues el conocer personas, el tener a tus amigos cerca, que te apoyen, que te ayuden a crecer, creo que eso es de las partes más importantes para poder lograr encontrar este balance, ¿no?

Pero por ejemplo, tú al tener demasiada tarea, demasiadas entregas, que tenías que terminar un proyecto y estar tan atareada con tantas cosas, ¿cómo fue que realmente lograste encontrar como este balance del que estamos hablando entre tu vida personal? De conocer personas, de tener amigos, de salir, sobre todo salir, que creo que la universidad es como…

 Alejandra:

El punto donde…

Marian:

Donde quieres hacer las cosas, donde quieres salir, quieres, lo que más quieres es conocer, ¿no?

Pero también a la vez, tienes que cumplir.

Alejandra:

Obviamente.

Sí, creo que no fue muy fácil.

Yo creo que muchos lo ven como: “ay entre semana, escuela 100% y fin de semana, viernes a domingo, pues mis amigos”.

Yo la verdad estaba pues, como metida en proyectos que involucraban que yo tuviera que tener mi semana súper súper organizada, la verdad es que a mí como me funcionaba era, pues, cómo establecerme horarios de llegar temprano escuela, o sea más temprano de lo que empezaban mis clases, adelantar los pendientes que tenía de punto y aparte de mi carrera, y pues durante la carrera en las noches darle con toda la carrera y bueno, yo la verdad si apliqué que viernes era estar con amigos, ya como el desestrés de la semana, de exámenes. Ya viene fin de semana, ya voy a estar con mis amigos, ya voy a estar con, ya voy a poder disfrutar de lo que, pues de ese balance como entre amigos, carrera, más aparte proyectos, o sea cómo que creo que tienes que establecer horarios, tienes que establecer tu tiempo, no tienes que frustrarte, o sea tienes que como que encontrar ese… lo que te funcione a ti.

Creo que no a todos nos funciona, no sé a ti, por ejemplo, también estudiando conta, ¿cómo encontraste ese balance? Por qué sé que es una carrera que tienes que estudiar, o sea…

Marian:

Bastante.

(ríe)

Si, bueno para mí también fue algo como “complicado” encontrar este balance porque creo que, yo sí me centré un poquito más en la escuela, o sea tenía como mis objetivos en ese momento.

Igual, por ejemplo, desde que pase yo a cuarto semestre nos inculcaron mucho lo de “tienes que trabajar para poder salir y tener con ciertos, o sea terminar tu carrera con 2 años mínimo de experiencia”.

Alejandra:

De experiencia.

Si, claro.

Marian:

Y creo que, eso es algo como, que a mí se me fue metiendo, por que de verdad todos mis compañeros de clase estaban mucho como de “no pues, ya estoy trabajando en tal lugar y ya estoy haciendo no sé qué”.

Y entonces para mi fue como, algo muy complicado, el decir “okey, todos mis amigos ya están buscando trabajo”, ya estaban yendo a entrevistas y yo todavía no lo estaba haciendo y yo sentía que iba como un paso atrás.

Alejandra:

Si, claro.

Marian:

O sea, para mí era como de “no, no, no ya te estás tardando, ¿no?”

Iba yo en tercer semestre cuando empezaron todos con sus trabajos, algunos de mis compañeros y yo ya era como de “ya voy tarde”.

Alejandra:

Si, claro. Te entiendo.

Marian:

Ya voy tarde.

Y yo tenía 18 años, creo que apenas iba a cumplir 19 y yo estaba como “no inventes, tengo que hacer algo”.

Entonces creo que, cuando llegó ese punto en el que yo decidí ya realmente buscar un trabajo, comencé yo a trabajar en un despacho de contadores y pues para mí fue en cuarto semestre, yo, mis horarios nos cambiaron a la tarde y pues una vez que me los cambiaron a la tarde, yo iba a trabajar en las mañanas.

Entonces creo que ahí fue como el punto en el que revente y dije “¿qué estoy haciendo?”

Porque para mí todo era trabajo. Me despertaba súper temprano, iba al trabajo a la oficina, llegaba, cumplía con todos los pendientes y de repente era de, okey, bueno, termino el trabajo, corría la escuela, en la escuela llegaba, a veces ni comía, me comía a veces hasta la comida fría en el tráfico y ya llegaba y era como de “okey la escuela”.

Y entonces, a mí me empezó a costar mucho trabajo esto de rendir bien en la escuela, de rendir en el trabajo y sobre todo de tener esta vida personal, que yo la empecé a dejar un poco atrás, y fue cuando entendí que no debía yo de compararme con las demás personas.

Alejandra:

Claro.

Marian:

O sea, que al final cada quien tenía su tiempo, cada quien tenía sus decisiones, o sea, cada quien elige que es lo que es mejor para ellos y fue cuando yo entendí que no tenía que ir corriendo detrás de todo el mundo, sino que tenía que ir a mi paso, que tenía yo que pensar en mí, en mi salud en ese momento, porque yo comencé, o sea, a veces ni comía en el día, de verdad ya tenía dolores en el estómago terribles, dolores de cabeza, o sea, ni siquiera prestar atención y dije “ya hasta aquí, tengo yo que poner mis propios límites, tengo yo que fijar mis metas también”.

Alejandra:

Claro.

Marian:

Y decir “okey, ¿qué es lo mejor para mí en este momento?”, y tal vez no estaba yo lista para poder pasar a este ciclo profesional.

Entonces decidí postergarlo, decidí ir a mi tiempo y poco a poco comencé a cumplir todas las metas que yo misma me fui proponiendo, ¿no?

Alejandra:

Y a su tiempo que tú querías, ¿no?

Marian:

Sí claro.

Porque a mí eso me costó mucho trabajo, o sea la verdad es que yo algo que admiro mucho de ti es que tú tenías responsabilidades en un grupo de la escuela, igual tenías mil entregas y yo estoy consciente de ¿qué es una estudiante de arquitectura?, o sea creo que pues todas las carreras tienen su nivel de dificultad.

Alejandra:

Claro.

Marian:

Pero en arquitectura como todo es tan exacto y estar haciendo maquetas y cortando y todo es como “hands on”, todo es hacerlo. Yo ahorita lo puedo ver, por ejemplo, con mi hermana que está estudiando esa carrera, o sea, de verdad yo te admiro. O sea, quisiera que me compartieras un poco de tus tips, ¿cómo le hacías para organizarte?, y realmente a ti ¿qué fue lo que te funcionó?

O sea, porque es muy fácil decir “no pues tenía que llegar temprano a la escuela, me organizaba y tenía, yo, no sé, tal vez una agenda, pero ¿qué fue realmente lo que a ti te sirvió?

Me imagino que hubo mucho esa prueba y error hasta encontrar lo que realmente te funcionó.

Alejandra:

Si, claro.

Pues creo que lo primero que yo me di cuenta era que, apasionarme por lo que me gustaba como tú dices, o sea, en el grupo que yo tenía en la universidad y también por mi carrera, el saber que me apasionaba de verdad era como mi primer impulso para “okey, me voy a organizar”.

Porque sino ni siquiera te llega la motivación para organizarte, o sea, creo que, si no lo disfrutas, no te gusta, hasta te da flojera levantarte.

Creo que a mí fue lo que más me funciono, que me encantaba los proyectos en los que estaba, que me encantaba estar con mis amigos, la verdad es que era algo que extraño muchísimo de la universidad, el verlos, el platicar y aparte pues a la mejor ya no me tocó ahorita la famosa “escuela en línea”.

A mí me tocó todavía el ir presencial, ver a mis amigos, todo.

Creo que mi principal tip que yo podría decir es que te apasiones por lo que hagas, obviamente también yo me considero una persona muy organizada.

Por ejemplo, yo tenía mucho mis días de “yo tengo esta entrega del proyecto que tenía por parte de mi carrera este día, entonces un día antes ya tienes esa lista”.

Obviamente también no lo hacía solita, trabajábamos incluso juntas en ese proyecto.

Marian:

(ríe)

Alejandra:

Creo que, no me vas a dejar mentir, que ahí estaba mi calendario, que lo imprimía de internet y que me ponía así, pero era algo que me encantaba hacer, yo la verdad es que estaba totalmente fascinada.

Y en la carrera, era un poquito igual, arquitectura la verdad es que sí es como “tal viernes vas a entregar tal proyecto”, entonces o sea ya como que yo tenía en cuenta que eran ,no sé, 5 días por decir algo, que lo tenía que hacer.

Entonces en la escuela como te decía, yo llegaba temprano, hacía mis pendientes, yo también iba solamente en la tarde y antes entrar a mis clases, 2-3 horas y le dedicaba a mi carrera para pues en la entrega ya estar bien.

Pero básicamente yo creo que son esos los principales tips; organización, pasión por lo que haces y yo creo que con eso vas a sacar tus proyectos adelante.

Marian:

Lo logras.

Alejandra:

Si.

Marian:

Me llamó mucho la atención esto que dices, que es amar lo que haces, ¿no?

Creo que muchas de las personas a veces sólo hacemos lo que tenemos que hacer, sin tener como esa pasión por lo que estamos haciendo, ¿no?

Alejandra:

Claro.

Marian:

Yo creo que eso es muy importante, o sea, poder realmente apasionarnos, que nos guste para poder disfrutar, o sea, cada ciclo de nuestra vida, disfrutar ese proceso y, sobre todo, pues bueno, tener esta parte de elegir realmente que es lo que quieres.

Alejandra:

Claro.

Es súper importante, la verdad es que yo, como tú nos contabas, a la mejor que hubo un tiempo que ya pues era como frustrante ¿no?

O sea, comer el carro, sentirte mal, o sea y créeme que hablando con incluso amigos que tenemos nosotras en común, lo oí mucho, o sea, y la verdad es que sí era algo que incluso a mí me daba con mucho miedo, por ejemplo, en un punto si yo decía “qué miedo pasar de este ciclo académico a ese ciclo profesional”, o sea, cuando lo llegue a pasar de verdad que miedo, o sea ¿cómo voy a hacerle para hacer todo? y la verdad es que pues, sí fue yo creo que algo que tengo como muy marcado, el todas las historias que luego nos sentábamos a platicar ahí con nuestros amigos y todos nos contaban a su manera, en su carrera, en su punto de ver, pero pues que al final si oíamos.

Creo que sí, eso es algo difícil, no es muy fácil, así como “ay ya, me voy a poner a trabajar, voy a trabajar y a estudiar”, no es fácil.

Creo que es algo que todos pasamos, no es nada fácil. De verdad nada.

Marian:

Pero tampoco es imposible de lograr, ya cuando lo piensas, dices si necesitas realmente estar en un lugar en el que te guste, sentirte tú feliz con lo que estás haciendo y pues realmente marcar en qué momento decides iniciar el ciclo, ¿no?

Que estés 100% convencida contigo, que vaya con tu plan ahora sí de vida y no con el plan de las demás personas.

Alejandra:

Que no te compares, creo que es algo muy muy importante, lo que tú decías, no te compares.

No porque lo de tu salón, tus amigos, ya empezaron a trabajar… a lo mejor tú ya tienes planes, proyectos, todo lo que quieras, pero vas a empezar.

O sea, tú estás consciente de cuando lo vas a hacer y pues sí, que estés consciente de tus tiempos, son tus tiempos.

Marian:

Si, sobre todo sentirnos libre de elegir nuestro ciclo y en qué momento iniciarlo, ¿no?

Alejandra:

Claro que sí.

Marian:

Y aquí, Ale, te pregunto ¿cuándo fue cuando tú decidiste ya realmente pasar al ciclo, del ciclo académico al profesional?

Alejandra:

Pues para mí fue acabando la carrera, creo que muchos estamos acostumbrados como tú nos comentabas a hacerlo durante en la vida, bueno, el ciclo escolar.

Creo que es algo muy remarcado, incluso que nuestras generaciones de familias como que lo tienen muy presente.

Yo la verdad yo si tomé mi decisión de que yo quería acabar mi carrera, disfrutarla 100% en todos los sentidos; amigos, escuela, también proyectos para acabar la carrera que son bastante tardados, bastante complicados, la famosa tesis… ¡que que bárbara!

Pero, yo sí me acuerdo de que tenía muy muy puntual desde que estaba en la carrera, que yo quería terminarlo, y que cuando ya la terminará como que, pensar exactamente en donde me quería dedicar, donde quería explotar todo lo que había aprendido y ya yo empezar a dar ese paso.

Fue exactamente ahí, la verdad es que, para mí, fue un apoyo muy muy grande que mi familia también, o sea fuera como “claro, o sea son tus decisiones, es tu carrera, es tu paso, tu ciclo, tú lo vas a dar”,

La verdad es que ahí fue cuando lo di, al final, ya que había terminado todo.

Marian:

Oye, me encanta.

Porque realmente pues tú elegiste el momento y, sobre todo, pues, o sea, tu familia te apoyo ¿no?

Que muchas veces existen este tipo de prejuicios, de distintos prejuicios, o sea, existen diferentes situaciones en las que a veces los papás nos inculcan el “sabes que, terminas la carrera y te tienes que casar, tienes que ya buscar con quién vivir por que pues ahora sí que esa es la costumbre la familia”, ¿no?

Pero también hay otras personas, otras familias, otras costumbres en la que es como de “no pues desde antes tienes que trabajar” y porque ellos traen más como está onda de crecer y que si no inicias a tiempo se te va ahora sí que, casi casi el tren, ¿no?

Ya se te está yendo la vida y yo creo que aquí el que el que tus papás te hayan apoyado independientemente, digo, yo no sé cuáles hayan sido realmente las costumbres que ellos tenían.

Alejandra:

Si, claro.

Marian:

Pero que te hayan apoyado en tus decisiones y sobre todo en qué momento tú te sentías lista para hacer las cosas, creo que eso se me hace algo maravilloso.

Alejandra:

Si, no.

Y la verdad, o sea ahorita que comentabas que por ejemplo que tú veías a tus amigos, creo que me identifiqué mucho, yo me identifico y estoy segura, que a lo mejor tú, que no estás oyendo en tu casa a lo mejor te identificas.

Si, yo tenía muchísimo la presión de que mis amigos ya trabajaban, mis amigos que tengo de toda la vida ya trabajaban, yo veía a mis compañeros de la carrera que ya estaban trabajando y yo seguía, pues dedicándome a la escuela.

La verdad, sí fue muy difícil, no te voy a decir así que fue como “ay, todo increíble, salí de la carrera y empecé a trabajar”, fue un proceso que me costó muchísimo, pero muchísimo, muchísimo, incluso con el apoyo que yo tuve, pero sí creo que es muy importante que yo lo tuviera definido y que al momento que yo me sintiera realizada, pues sí como dar ese… es un pasito, o sea creo que al final todos lo ven como muy fácil, pero no es fácil o por lo menos yo lo puedo decir, no fue nada nada.

Marian:

No, yo creo que tiene su nivel de complejidad, todo tiene esa dificultad y creo que para cada persona se le presenta de diferentes maneras

Alejandra:

Claro.

Si, mucho.

Marian:

Oye, y por ejemplo ya una vez que entraste al ciclo profesional, ¿qué tan difícil fue para ti acostumbrarte a estar ya en el ciclo profesional y de haber dejado la parte académica atrás?

Alejandra:

Pues más que difícil yo siento que fue raro, o sea yo venía muy acostumbrada a mucho mis horarios, por ejemplo, yo estar presencial, o sea sí estar todo el tiempo de que voy, y yo entrego físicamente o que tengo una clase, una corrección pues en mi caso con mi maestro, con mi arquitecto

Y la verdad es que sí, como que fue muy raro que de repente, por ejemplo, esta modalidad de famosísimo home office, todo ya desde la compu.

Incluso en las entrevistas, o sea pues virtuales.

Fue raro o sea por ejemplo también, no sé, yo creo que a todos nos pasa que ya estás en el ciclo profesional y sientes que no tienes tiempo, que nunca vas a acabar.

O sea que a qué hora duermo, porque pues en la carrera si era como un poquito más. A lo mejor cuando no tenía entregas de que pues sí me dormía a las 10 de la noche y me levantaba a las… ¿qué te gusta? a las 6 de la mañana para llegar a la escuela a las 8, por decir algo.

Y acá no, o sea de verdad que sí tienes igual, no sé, alguna entrega con un cliente o algo no te da la vida para acabarlo. O sea, yo de verdad veo a gente con más experiencia por ejemplo en mi caso aquí en la oficina y que yo digo así ¿cómo le hacen? o sea ¿cómo le hacen para acomodarlo tan bien otra vez?

Y o sea, es como un estilo siento que muy muy diferente a un estilo que tenemos muy cuadrado de que “ay, tengo esta tarea para el viernes “x” y acá no, es como primero tienes que presentarlo al cliente, luego tienes que una primera entrega, luego tienes una segunda entrega, luego corrígelo otra vez y luego no sé qué.

Marian:

Y que nunca acabas, ¿no?

Que son como pendientes que siguen y siguen y siguen.

Alejandra:

Y aparte, vas con un equipo, por ejemplo, a mí me pasó mucho que en la universidad pues era más como siempre individual y acá es cómo, o sea, no vas a entregar un proyecto completo tú sola, o sea, trabajas con un equipo tienes obviamente un jefe, o sea creo que es algo, que yo veo y digo “wow, ¿a qué hora duerme mi jefe?”

Que barbaridad.

Y también el equipo que tienes que estar en comunicación, tienes que tener un programa muy claro para sacar el proyecto, para sacar los diseños, la verdad sí fue como raro todo esto, también los horarios te digo, o sea, yo de verdad a veces digo “¿cuándo voy a dormir? o ¿cuándo voy a acabar?

Marian:

¿Cuándo acabo?

Alejandra:

Si, ya nunca voy a acabar.

Marian:

No, es que realmente es complicado.

Creo que esto es uno de los retos más difíciles y sobre todo ahora, ¿no?

Que es como la parte del Home Office y que es como, pues sí, prácticamente estás todo el día haciendo el trabajo y aun así sentir que no acabas, pues es complicado ¿no?

Alejandra:

Y también encontraron, por ejemplo, lo que era de la Universidad; de amigos, pareja, familia, o sea también, ¿a qué hora estoy con mi familia ahorita?

Obviamente lo de los amigos ahorita, pues a lo mejor está un poco más difícil, pero o sea, si, luego por ejemplo, se me va de repente ya no le contesto a mis amigos, como estoy tan…

Es más difícil, siento que es como en la organización, es mucho más complicada.

Pero que igual de cierta manera acostumbrándote y bueno por lo que veo, pues si se va a poder.

Marian:

Sí, es que claro.

Creo que la vida aquí otra vez volvemos a este balance entre la vida personal y laboral también aquí, o sea, es muy complicada porque al final tú tienes una vida personal, tú tienes amigos, tienes pareja, tienes a tu familia y que al final es igual de importante como lo es el trabajo.

Alejandra:

Si, claro.

Creo que es muy muy importante, incluso yo siento que pues, más que la universidad porque en la universidad, o sea, era como más casual.

O sea que pues sí, la verdad de repente sí es como “hoy quiero estar con mi familia, quiero estar con mi novio, quiero… pero aparte tengo muchísimo trabajo”, o sea, eres como más… a lo mejor en fin de semana incluso de repente a mí sí me toca que tengo que adelantar tal cosa para la siguiente semana pero también este fin de semana ya lo tenía planeado para algún plan.

Entonces sí es como es…

Marian:

Es complicado.

Sí, a mí lo que me pasa es que es el fin de semana yo digo “tengo que descansar porque si no, no rindo en la semana”.

Pero te sientes hasta culpable de no estar haciendo todos los pendientes que podrías estar adelantando el fin de semana, pero consideró que también ese tiempo descanso es vital para que realmente puedas rendir los siguientes 5 días.

Alejandra:

Sí, totalmente de acuerdo contigo Marian.

Marian:

¿Y cómo, bueno, aquí ya yéndonos a la parte de tu día a día realmente como cambiaste la rutina o sea para ti que fue el entrar a una rutina laboral?

¿Y cómo la has sabido llevar con estaba parte del equilibrio entre la vida personal y profesional?

Alejandra:

Pues creo que a mí en específico me sirve mucho el que ya traía como la costumbre ser bastante organizada. Creo que eso sí lo estás trabajando desde que estás en la universidad, desde que eres más pequeña creo que al final que te crea un hábito y para pues un ciclo más complicado del que es el académico, por lo menos a mí sí me sirvió, o sea, por ejemplo, yo tengo muy establecido que a la mejor en las mañanas, yo quiero hacer ejercicio… y que ya sé que tengo junta a tal hora y que tengo entrega tal día.

Entonces sí, cómo prepararme, o sea, pero pues al final sí fue diferente porque como te digo la carga de trabajo de un día, o sea, la que yo tenía la escuela de un viernes a lo mejor toda la semana la voy a tener.

Entonces si fue como un poquito más complicado como pues adaptar estos horarios para mí, pero pues al final pues sí he encontrado la forma, sobre todo yo siento que lo mejor es si tener esa organización, tener esa planeación, tener buena comunicación, porque creo que eso es muy… o sea la universal te digo, a lo mejor yo no la tenía pero aquí en el trabajo pues si de que, a tal área, con mi jefe que estar como en esa misma sintonía, creo que es algo que tú vas aprendiendo y que al final pues tú lo vas desarrollando cuando empiezas a este gran ciclo que es el profesional.

Marian:

Si, sobre todo tú tienes que adaptar a las exigencias de tu trabajo, ¿no?

Porque yo sé que tu trabajo es completamente diferente al mío, que se maneja diferente, que tal vez las juntas son a diferente hora y sobre todo pues saber adaptarnos, saber cómo realmente cómo funciona y qué objetivos tenemos que lograr, ¿no?

En este ámbito laboral, pero también es como ¿qué le das tu importancia a tu vida personal?

Alejandra:

Si, creo que es muy importante tenerlo en mente, o sea lo que te comentaba, a lo mejor yo tengo mucho la idea de que por ejemplo mis fines de semana si mi familia, mis amigos, aunque sea mis amigos a distancia, mi novio, o sea, sí lo tengo muy muy claro, y a partir de eso ya en mi semana puedo organizarme para sacar mis pendientes y para pues si no dejarlo de un lado.

O sea, todo como tener ese balance, creo que es un balance que tenemos que tener muy en la cabeza, muy presente, porque al final pues sí, como tú decías a lo mejor es como si no tengo ese respiro de fin de semana, no voy a rendir bien en la semana y si, es totalmente obvio.

Marian:

Sí claro, porque es imposible que alguien pueda como seguir todo ese ritmo, ¿no?

O sea, creo que tal vez los primeros, no se los primeros meses padre, o sea, lo aguantas y tal vez hasta los primeros años ¿no? Pero ya más adelante hasta las complicaciones que te puede traer esto, o sea creo que en tu salud integral como persona puede ser algo como que te traiga consecuencias y así como también, pues en tu vida personal, siento que de repente vas a voltear y vas a decir “¿y mis amigos?

Alejandra:

Si, y creo que es algo muy, por ejemplo, igual seguramente te pasó a ti Marian, cuando entré a trabajar obviamente no es la misma carga que el primer, las primeras dos tres semanas cuando empecé a trabajar, al tercer mes que ya, o sea el principio “si hay que fácil”.

Marian:

¿Está sencillo, amo mi trabajo!

Alejandra:

Si, y ya al tercer mes es como “Dios mío”

Marian:

(ríe)

¿En qué momento?

Alejandra:

¿Qué es esto?

Y yo, por ejemplo, platicando con mis amigas, platicando contigo, platicando con muchas personas y me dicen así como “uy, empezaste a trabajar, estás súper feliz, espérate” … es totalmente real.

Marian:

(ríe)

Ahora yo te puedo decir, ¿y cómo te va en tu trabajo, Ale?

Alejandra:

Si, justamente.

Marian:

¿Qué tal estuvo tu día?

Alejandra:

Creo que si es muy muy muy notorio eso y si desde el principio eso es lo que te digo, o sea desde el principio voy a hacer esto y voy a continuar con eso para si no perder, como tú dices, o sea, al final se vuelve más complicado, mucho más complicado y ya años de experiencia en este ciclo profesional creo que empiezan a crecer las responsabilidades, tú también quieres crecer como persona.

Obviamente en este ciclo porque pues empiezas, pero pues creces y creo que al final pues todos tenemos esos sueños que queremos convertir en metas en este ciclo.

Y pues sí, obviamente la carga de trabajo aumenta, todo.

O sea, creo que es algo muy notorio.

Marian:

(ríe)

Notorio.

Y rescatando un poquito de lo que hablamos hace rato es lo mismo, o sea, yo creo que es muy importante también estar feliz con lo que estás haciendo, sentirte cómoda en el lugar en el que estás, con las personas que trabajas y que realmente lo que tú estés ejerciendo te guste ¿no?

Te apasione para poder seguir con esas ganas y al final seguir como motivándote, poder seguir poniéndote nuevas metas ¿no?

Creo que esto es como muy importante para poder lograr lo que realmente quieres ser en algún momento.

Alejandra:

Y creo que por ejemplo justo lo que estás ahorita mencionando, de que vas a conocer gente, tu equipo de trabajo, lo que tú quieras.

Y un poquito lo vi, por ejemplo, en lo que te contara la escuela que para mí mis amigos en la escuela, pues sí era como me alivió de que los veía y un poquito acá también, la verdad es que el tener un buen equipo de trabajo, un ambiente que tú disfrutes creo que también al final es como es una felicidad que vas a encontrar en este ciclo.

Algo nuevo también.

Marian:

Si, al final que te guste.

Que te conectes a las juntas y que no sea solamente como del trabajo, que pueda ser como ¿cómo éstas?, ¿cómo te va?

Alejandra:

Si exacto.

Conocí gente nueva, van a venir más personas que van a entrar este ciclo profesional, que pues todas darles un poquito de experiencia que a lo mejor es muy poquita, pero la pues la estás viviendo.

Marian:

Y sobre todo tomar la de ellos también, ¿no?

Creo que a veces las personas con más experiencia tienen tanto que compartir y me encanta ver a aquellas personas, que ya las veo yo felices de alguna manera, realizadas, acostumbradas a estar en este ritmo y que puedes aprender tanto de esas personas, que eso me encanta, la verdad, y te motiva te motiva, a veces tienen ciertos hábitos que dices “oye me encantaría poder hacer eso que está haciendo como un hábito, ¿no?”

Por ejemplo, esto de las personas que se levantan a las 5 de la mañana y tienen un tiempo para ellos mismos el famoso “me time”, o sea creo que es algo bastante padre, que a mí me gustaría poder inculcar en algún momento en mi persona y poder tomar como esas cosas buenas que tienen cada uno para poder enriquecer tu vida.

Alejandra:

Claro, sí.

Totalmente de acuerdo contigo Marian.

Marian:

No sé qué opines tú Ale, pero esta plática se está tornando súper interesante… y esto es sólo un poco lo que estaremos hablando hoy, así que no te vayas en un momento regresamos.

(corte comercial)

Marian:

Muchas gracias por seguir con nosotros. Esto es Contigo en cada Ciclo.

Oye y hablando, por ejemplo, de todos estos, todo lo que realizas en tu trabajo, todo esto me encanta escucharte, pero también yéndonos un poco como a tus proyectos, ¿qué proyectos tienes en mente?

Alejandra:

Pues yo creo que yo como proyectos personales ya como saliéndome un poquito de la empresa y de todo yo, la verdad, me encantaría poner una fundación.

Obviamente esto no quiero como “ya ahorita”.

Primero me gustaría crecer en este ciclo profesional y ya después de a la mejor, yo le calculo que, en 10 años, me veo poniendo una fundación.

Es algo que yo digo, que me gusta desde que estoy en la universidad, algo que tú y yo también pudimos compartir, todo esto de voluntariado y todo esto y la verdad es que para mí ese proyecto personal es algo que tengo muy muy en mente que me encantaría.

Obviamente estoy segura que me van a salir muchas más ideas, que voy a querer aterrizar, que voy a querer hacer, pero ahorita es que es como lo que más tengo presente.

Marian:

¡Ay, me encanta escucharlo!

Y de verdad, me va a encantar verte lograr todo lo que te estás proponiendo.

Eso sí, la fundación me parece una idea increíble porque justamente como mencionabas, es algo que las dos compartimos y de verdad, no sabes la alegría que me va a dar verte lograr todo.

¡Me va a encantar!

Y aquí, algo que igual me surgió ahorita de duda, o sea que me dices que, en unos años, aquí… ¿cómo te verías tú en unos 10 años?

Alejandra:

Híjole pues la verdad creo que es una pregunta que últimamente, no sé a ti, pero a mí me ha salido muchísimo al tema sobre todo con mis amigos, o sea creo que yo estoy justo en esa edad donde todos ahorita se están… bueno veo mis amigos independizándose, como ya creciendo mucho y la verdad como te comentaba para mí fue un paso que yo me tardé en dar y pues a lo mejor yo voy con un poquito más atrasada, pero pues al final esa pregunta ha surgido muchísimo.

Yo la verdad en 10 años me veo creciendo profesionalmente, o sea, seguir creciendo a la mejor como ya en esta área que para a mí es un poquito más nueva, no tan relacionada con mi carrera, creciendo y también del lado me encantaría la verdad formar una familia.

Yo en 10 años ya la verdad me veo con una familia y encontrando este balance porque no me gustaría como 100% decirte como “yo quiero una familia y fin”, pues me gustaría como tener mi vida profesional, seguir creciendo, seguir explorando pues nuevas metas, pero también tener tiempo para mi familia, tener tiempo para irla creciendo de ese lado.

¿Tú cómo te ves en 10 años? ¿Es una pregunta que te hacen muy seguido o no tanto como a mí?

Marian:

Ay no, no.

Fíjate que casi no me la han hecho, creo que todavía en el ciclo en el que yo me encuentro aún todos estamos como averiguando.

Pocos amigos han tenido ya muy claro que es lo que quieren y bueno, tan sólo para mí aún estoy como en el proceso de encontrar realmente, ¿qué es lo que quiero vivir?, ¿cuál va a ser la manera en la que yo me voy a sentir completamente realizada?, por ejemplo, aún yo no sé si quiero tener una familia.

Tal vez me sentiría bien estando así, sin ser mamá.

Alejandra:

Y es totalmente válido.

Marian:

Claro y creo que aquí también nos enfrentamos como en algunos prejuicios, ¿no?

Creo que, por ejemplo, varias amigas a veces platicando un poquito acerca de esto es como “de no sé si me gustaría o no” y me dicen como de “¡cómo no vas a ser mamá!” y yo…

Alejandra:

Es algo muy muy válido.

Es algo muy muy válido, la verdad.

Marian:

Sí.

Y pues bueno, creo que digo todo esto tal vez puede cambiar en algún momento, yo sé que a veces existen factores que cambian pues qué es lo que quieres y pues ahorita yo me encuentro un poco más en esta parte de buscando, de encontrar realmente ¿qué es lo que quiero para mí? y sobre todo, pues de como quiero ser yo en 10 años ¿no?

O sea, me veo como una mujer realizada, pero aún no sé cómo, cómo quiero realizarme.

Alejandra:

Claro.

Marian:

Y creo que eso igual es algo como complicado.

Alejandra:

Si, creo que no sé, a lo mejor tú y yo ahorita estamos hablando de esas experiencias, de esto, de nuestro yo de en 10 años, pero la mejor tú y yo.

Y estoy segura, segura, segura, que tú que no estás escuchando, tienes otras metas también diferentes.

A lo mejor ya disté este paso que a lo mejor yo según yo, me estoy viendo en 10 años y a lo mejor una amiga mía ya lo está haciendo, o sea, es como, cada quien lleva sus ciclos como decíamos a su tiempo, a su manera, sobre todo es algo muy importante, o sea su manera.

Y creo que es totalmente válido que cada quien los viva como ella se siente, que los llene, que sean totalmente plenos para ellos.

Marian:

Sí, sobre todo que seas tu proyecto de vida.

Alejandra:

Claro.

Marian:

Porque creo que si pensamos en proyecto de vida, yo me puedo imaginar una cosa, pero sé que tú, Ale, que lo estamos hablando, te imaginas otra cosa completamente diferente y como le decíamos, tú que nos estás escuchando, tienes otro proyecto de vida, o sea, tal vez estas ideas que yo estoy compartiendo, las ideas que está compartiendo Ale para ti no van, pero es totalmente válido, es totalmente correcto para ti, o sea, realmente tener un proyecto de vida realizado a tu medida, hecho para ti y sobre todo para que tú puedas disfrutar de cada ciclo de la vida.

Alejandra:

Sí, claro y no ha sido fácil.

O sea la verdad es que sí, a lo mejor como decíamos, o sea a lo mejor en mis metas a futuro, yo lo veo como muy muy claro, el que quiero formar una familia, a lo mejor seguramente me voy a encontrar con trabas, tanto a lo mejor de fertilidad o muchísimas cosas que a la mejor ahorita ni siquiera se me están ocurriendo pero que pueden llegar, o sea creo que por ejemplo, ya como hablando un poquito de lo que yo he podido ver en todo esto que es Elige tus Ciclos, la verdad es que… información, herramientas que yo he podido ver que la verdad no tenía como tan en la cabeza lo importante, lo relevante que va ser.

Creo que es algo que sí, pues al final si, nuestro ciclo, pero pues también aprovechar todo lo que ahorita podemos rescatar, que podemos informarnos de muchas cosas.

Marian:

Sobre todo, o sea creo que aquí es elegir de manera informada, por ejemplo, algo que yo también, o sea, yo como Marian, pudiendo ver toda la información que trae Elige tu Ciclos, mi he llenado mucho de esta parte, por ejemplo, había algo que me llamó muchísimo la atención fue la vitrificación de óvulos, que tal vez ahorita estoy en mi etapa fértil y que puedo yo preservar mi fertilidad, que ahorita realmente pueda yo congelar mis óvulos y tal vez más adelante, digo ahorita lo pienso y digo “no quiero ser mamá, tal vez no quiero”, pero qué tal si en unos 10-15 años digo “bueno, si quiero”, a la mera hora siempre si quise y sobre todo haber tomado esta decisión informada, haber hecho lo necesario para alcanzar estás metas creo que es algo muy importante.

Alejandra:

Sí, totalmente de acuerdo contigo Marian.

La verdad es que sí considero que es muy muy importante estar informado, tener estas herramientas y bueno para mí la verdad ahorita es que Elige tu Ciclos ha sido una herramienta muy muy útil para mí.

Marian:

Ay, es padrísimo poder ver todo esto y saber qué pues realmente esta información nos ayuda a todas a crecer de manera personal y también de la manera profesional.

Y poder realmente realizar nuestro plan de vida y cumplir todas estas metas.

Ale, y para concluir… ¿qué mensaje podrías compartirnos a todas las personas que nos están escuchando y a mí?

Alejandra:

Pues creo que algo muy importante para concluir de todo lo que hablamos en este episodio, es que tus decisiones, lo que voy a hacer de tu vida, tus ciclos y como los vas a vivir son decisión tuya.

Yo creo que, a lo largo de tu vida, te vas a encontrar con factores que a lo mejor van a… pues entrar un poquito en esas decisiones como son familia, como son amigos, como son a lo mejor pareja, pero al final tú vas a tomar la decisión.

Creo que el amor propio es algo que tenemos que tener muy presentes siempre en todos nuestros ciclos de la vida y en todos los obstáculos que también nos lleguemos a presentar.

Creo que sería para mí algo que me gustaría compartir mucho y que sobre todo podamos, pues sí pensar a fondo este tema.

Marian:

Muchas gracias, Ale.

Por tus comentarios, por este mensaje tan bonito.

No olviden seguirnos en las redes sociales, estamos en Instagram, como @eligetusciclos, en Facebook como Elige tus Ciclos, donde podrán compartirnos.

Alejandra:

Será para nosotras también, pues muy importante, muy grato leerlas y que nosotras podamos compartir todos los temas que a ustedes les interesan, platicarlos de igual manera con especialistas, que podemos tratarlos más a fondo para que al final todo esto puede llegar a más mujeres y bueno sea una conciencia aún mayor.

Marian:

Muchas gracias Ale, por este comentario tan bonito.

Gracias a ti, que nos estás escuchando desde casa. Esperemos que esta plática haya sido muy enriquecedora.

Recuerda seguirnos en nuestras redes sociales, estamos en Instagram y como @eligetusciclos y en Facebook como Elige tus Ciclos.

Alejandra:

También para nosotras será muy importante y grato leer sobre qué temas te gustaría hablar en este podcast, para que nos los mandes por mensaje directo en nuestras redes sociales y también temas que te interese que lleguen a más mujeres para que podamos hacer una conciencia más grande acerca de todo esto.

Marian:

Esto fue todo por hoy.

¡Muchas gracias!

Hasta la próxima.

Alejandra:

Hasta luego.

Invitamos a María Sama, Maestra en Mercadotecnia y Publicidad, además de ser una reconocida Locutora, para platicar acerca de cómo es que ha logrado alcanzar el balance entre su vida personal y profesional, los retos a los que se ha enfrentado a lo largo de su vida, las decisiones que ha tenido que tomar para ser la mujer que es hoy, y sobre todo, el consejo que te da a ti como mujer para alcanzar tus metas y encontrar la felicidad en el proceso. De todo esto y mucho más hablaremos en este segundo capítulo ¿qué estás esperando para escucharlo?

Transcripción.

Marian:
¡Hola que tal!
Bienvenidos al podcast Contigo en cada Ciclo, donde estaremos teniendo invitadas especiales cada capítulo que nos compartirán experiencias para enriquecer la vida de otras mujeres.
Yo soy Marian Galindo y el día de hoy tenemos a Vanezza Zita, una colaboradora que nos estará apoyando en tratar el tema de este capítulo. En este capítulo daremos continuidad al tema del equilibrio entre la vida profesional y personal. ¿Se acuerdan que en el capítulo anterior hablamos de qué pasa con las mujeres como nosotras que apenas estamos iniciando nuestra vida profesional cuando nos estamos integrando en el ciclo laboral después de haber terminado el ciclo académico? E incluso cuando se mezcla el académico con el laboral. ¿Cómo alcanzar ese famoso balance entre tu crecimiento laboral, las responsabilidades que tienes ahí? Y él no descuidar tu vida personal, tu familia, tus amigos.
Es por eso que el día de hoy trajimos a una invitada especial que nos hablará sobre este tema, pero visto desde una perspectiva diferente, tocado desde la experiencia que tiene en el ciclo profesional y familiar, es decir cuando ya estás trabajando y llega ese momento en el que tienes que decidir entre tener una familia o dedicarte a tu crecimiento laboral o simplemente juntar ambas.
¿Qué te parece Vane?

Vanezza:
Pues me parece estupendo, muchas gracias por la colaboración. Muchísimas gracias, saludos a todo tu auditorio y pues Marian había tratado todo este tema de pues lo profesional. Cuando apenas vas a empezar a trabajar, cuando apenas te vas a integrar a la vida laboral o cuando acabas de terminar tus estudios y ahora en compañía de una muy querida amiga mía que se llama María Sama, ella es maestra en Mercadotecnia y Publicidad, además de locutora muy exitosa, pues la invitamos el día de hoy para que nos platiqué; cómo es ahora que una persona está trabajando, que una persona ya tiene bastante experiencia en el trabajo, que ya se fijó metas y que también ya está este tema de la familia. Si está por iniciar la familia, si ya tienen una familia, si ya decidieron formar una familia, como lo equilibran en esta balanza, ¿no?
¡Pues muy buenos días, María Sama!
¿Cómo estamos?

María:
¡Ay, aquí sigo peinándome oigan!
Bien ¿y ustedes?
Que gusto me da estar con ustedes, poder compartir y yo siempre lo digo; poder compartirme, que es lo más valioso que existe cuando tenemos un micrófono al frente, el poder compartir un poquito de lo que soy y de lo que he vivido que pueda aportar en la vida de los demás. Estoy gratamente agradecida con ustedes por invitarme, ¡muchas gracias!

Vanezza:
No, al contrario. Muchas gracias por aceptar el compartir con mujeres tus experiencias para que puedas enriquecer la vida de otras personas con todo lo que has vivido, que ha sido bastante.
Entonces, vamos a empezar. ¿Cómo has combinado esta vida profesional y personal? ¿Cómo has logrado este equilibrio? Si es que existe, ¿verdad?

María:
Pues mira, yo creo siempre tenemos que estar preparadas por que la vida nos va a sorprender. A mí me sorprendió, cuando de pronto me encontré en un consultorio médico porque me dolía mucho el estómago y de pronto el doctor me dijo que tenía un tumor en la cabeza. Todo esto fue porque empecé con unas alteraciones hormonales terribles, porque obviamente me estaba cuidando para no tener hijos con unas inyecciones, que no se las recomiendo, que son terribles para no embarazarte.
Que dicen, la verdad no recuerdo el nombre, pero dicen que cuando te la pones, en 6 meses no vas a tener tu periodo con una sola inyección, creo que yo me acuerdo que me puse como tres, ¿no? ¿por qué no?
Entonces yo no sabía todos los estragos que causaba esto y cuando llego con la ginecóloga, pues obviamente mis hormonas estaban vueltas locas y yo también. Y ya cuando llegó con ella, pues me dice, sabes que te tienes que hacer un perfil hormonal para saber qué es lo que está sucediendo en tu cuerpo.
Entonces, pues háztelo y vemos qué onda. Y cuando me entregan los resultados, pues la prolactina estaba súper elevada y la prolactina es una hormona que segrega la glándula hipófisis, que cuando se altera empieza a salir leche de las mamas, afortunadamente a mí nunca me salió nada de eso, porque yo que me hubiera asustado mucho, pero éste, pero pues sí, el diagnóstico era relacionado con un tumor en la glándula hipófisis y que a la mejor era esto lo que yo tenía sin que los doctores hubieran estudiado este antecedente de mi bombardeo de hormonas.
Entonces hasta que llego con un neurólogo increíble que se llama Chalita, que ya que me aventé el gol, cuando llego con él me dice: no, o sea olvídalo, ¿qué te pusiste antes? Porque yo viendo tu tomografía, resonancia con contraste, todos los análisis que me hice pues no tienes nada. O sea, si metemos a 10 personas, tres o cuatro tienen esta forma que tú tienes, que se puede malinterpretar.
Pero bueno, Marian y Vane y todos, ¿qué les cuento? Que esto pasó después de 6 meses de creer que yo sí tenía el tumor, de consultar miles de doctores, de hacerme muchísimos análisis y bueno pues al final resultó que era un falso diagnóstico, pero me la pasé muy mal, terminé con ansiolíticos pensando en que no sabía si me iba a morir o no. A pesar de que los tumores regularmente son benignos, pues siempre está la posibilidad de un tumor maligno y que no te pueden hacer una biopsia por el lugar en el que está situado, entonces fue muy complicado para mí escuchar de pronto de una ginecóloga que no iba a poder tener hijos, ¿no?
Entonces, bueno, después de que pasé este susto, sigo con mi vida, estoy como embajadora de Suzuki, me contratan, viajo todos los fines de semana, adicional a esto, pues tengo mi trabajo godín. Yo siempre digo que tengo mi parte godín, ¿no?
Que comparto muy bien con Vane, porque trabajamos también juntas.

Vanezza:
Exactamente.

María:
Y entonces, pues bueno, estoy haciendo mi vida godín y la parte de rockstar con Suzuki, viajando todos los fines de semana, sigo haciéndome todos mis chequeos, porque eso es algo que creo que no debemos de dejar de hacer nunca. Y pues ahí conozco a mi esposo, el papá de Alondra, bueno mi pareja porque no me he casado y pues ahí nos conocemos.
Él sabía lo de mi situación, me acompaña a un chequeo médico y cuando llegamos con el otro doctor pues me dice: ¿sabes qué? tus hormonas ya están como nivel tipo premenopáusica, así es que si no te apuras pues va a estar muy complicado que puedas tener hijos por todo este antecedente qué traes ¿no? Y yo, bueno pues ni modo, salimos de la consulta y Arturo me dice: sabes que para mí sí es importante tener familia y tener hijos ¿no? Que que válido y que importante, chicas no me dejaran mentir, platicar de esto con tu pareja.
Porque si no sabes qué plan tiene él o ella, también puede ser, y no sabes qué plan tienes tú de vida, pues no sabes qué es lo que va a estar sucediendo después, si tienen futuro juntos y muchas veces ni siquiera lo platicamos. No lo conversamos. Entonces bueno, pues empezamos a platicar de eso y yo le dije: pues sí, también para mí, yo la verdad no quería tener hijos, pero después de que me dijeron: no vas a poder tener, pues la verdad…

Vanezza:
Es diferente.

Marian:
Se prende la cosquillita, ¿no?

María:
Exacto, o sea de pronto dices: ¡ay, caray! Que feo, o sea…

Vanezza:
Deja lo pienso bien.

Marian:
Recapacitamos.

María:
Exacto, déjame recapacito y entonces a lo mejor sí.
Y bueno, pues saliendo de esa consulta nos cambió la vida porque dijimos: bueno, vamos a dejar de cuidarnos, a ver qué sucede. Y pues el doctor me dijo: en un año probablemente te embaraces, y si en un año no pega, pues te voy a estar haciendo un tratamiento, ¿no? De esos carísimos de París, porque también me enteré que están carísimos y costosísimo y dije: No, pues igual y ya si llego a tratamiento, ya bye. Pero en ese inter, pues también ¿porque no?, yo ya llevaba el primer semestre de la maestría en mercadotecnia. Entonces, pues yo ya estaba en la escuela y clavadísima estudiando, además de mis chambitas, que tengo ¿no?
Colaborando en Exa FM, viajando con Suzuki los fines de semana, viendo la parte de todo el grupo editorial que es grupo medios, con todas las revistas, este… y metiéndome en otros proyectos. Entonces si al final pues también yendo a clases. Y bueno, decidimos/tomamos esta decisión, ya vivíamos juntos, entonces, pues pasan cuatro meses y pues a los cuatro meses quedó embarazada.

Vanezza:
Y estudiando aparte.

María:
¡Y estudiando la maestría!

Marian:
¡Wow!

María:
Entonces sí, por supuesto te entran dudas y dices: ¿sabes qué?, no creo que pueda con esto y no creo que sea buena idea combinarlo, entonces llega tu mente pues por supuesto el “voy a dejarlo, voy a dejar la maestría y voy a tener que seguir con mi vida”, que esto es lo que me shockea, qué bien decías Marian, es muy fuerte para nosotras como mujeres tener que estar listas para combinar todo, de pronto te llega un bombardeo y dices: es que, ¿cómo le voy a hacer para hacer tantas cosas? O sea, es imposible. Y que frustrante, porque no me dejaran mentir, supongo que tú Marian eres workaholic igual que Vane y que yo.

Marian:
Ja ja ja. Por ahí voy, ese es el camino.

María:
Y seguro algunas amigas que nos están viendo también, que nos encanta trabajar y andar en la chorcha y terminas de trabajar, y vas a un evento, y terminas el evento y te vas de fiesta con el cliente.
Y entonces, nos encanta esta vida…

Vanezza:
Esta adrenalina, ¿no?

María:
Aha, esa adrenalina y esa convivencia con la gente y todo. Digo, ahorita por la pandemia, pues se reduce, pero a nosotros que nos gusta estar en el mundo laboral dices: que injusta es la vida porque quién se tiene que sacrificar, pues soy yo como mujer, porque el hombre no puede traer la panza ahí cargando.
Entonces, pues ni modo ¿no?
Me toca a mí hacer esta parte de sacrificio y de saber combinar las cosas. Entonces la pena también, porque si lo voy a decir, yo soy súper vanidosa.

Vanezza:
Como todas nosotras.

María:
¡Exacto!

Marian:
Es normal.

María:
A mi si me llego a dar pena de decir: híjole, voy a empezar a ir con panza a las juntas, este… voy a empezar a ir a las clases con panza… y en las clases pues todavía yo me mezclaba mucho con los universitarios, ¿no?
Yo estudié en la Ibero en Santa Fé y si llegaba a un horario en la tarde, aunque me iba hasta en la noche, pero pues había universitarios… y a pesar de que si ves la madurez en la gente en la que va a las clases a la maestría, o sea si ves el perfil totalmente diferente, si me daba penita llegar con mi panza a la universidad, porque decía: híjole, creo que no me veo tan ruca y cuando yo llegué aquí y me vean la panza van a pensar que estoy estudiando la universidad y que se me fue, ¿no?

(Vanezza y Marian ríen)

María:
Y digo, les cuento esta parte de la mente que muchas veces nos da pena decir, pero que sucede y que eres vanidosa y qué vas a decir: ay, voy a empezar a engordar y voy a llegar gorda a clases, cuando yo pensaba en mi mente cuando empecé a estudiar la maestría… “a lo mejor voy a encontrar al galán y el amor de mi vida en la clase, ¿no?”

(Vanezza y Marian ríen)

Marian:
¿Cómo me puede ver así?

María:
Aha, entonces ya era demasiado tarde.
Pero si, son ese tipo de pensamientos que te invaden porque eres un ser humano y al final, pues si sientes este tipo de cosas. Pero bueno, pues al final creo que lo hice bastante bien, si dejé de estudiar un semestre porque pues en lo que das a luz, en lo que amamantas.

Vanezza:
Claro, si, ya estaría muy difícil llevar al bebé cuando lo tengas, ahí la maestría, ¿verdad?

María:
Exacto.

Vanezza:
Fíjate que aquí lo que estamos viendo es está toma de decisiones tan fuerte, estamos viendo también que hay mucha desinformación, a veces no nos dicen cómo está todo, hay malos diagnósticos, no sabemos que hay un tratamiento, no sabemos que haya opciones, desconocemos muchas veces todo este mundo hasta que ya estamos en él.
Precisamente esa es la labor de Elige tus Ciclos, de contarnos, de decirnos que hay opciones, que hay tratamientos, que los averigües, que los investigues previos a ¿no?
Para que tengas todo esto poder de decisión ¿no?
Precisamente, a mí me pasó algo similar en la cuestión de que… yo, me dijeron: bueno, pues es que tú te puedes embarazar después de los 40 facilísimo, no hay problema, o sea, ya la tecnología ha avanzado, eso es lo que nos habían comentado y pues tú te confías y ya cuando llega el momento y dices: bueno, ya tengo 40 años, ahora sí, voy a ver la cuestión de los hijos y me empieza a decir: ¡ah!, este… si, pero fíjate que sí congelabas tus óvulos, que si ahora va a ser con reproducción asistida porque ya envejece el óvulo.
Me empezaron a decir una serie de cosas, que la mera verdad a mí me asustaron.
Entonces, si yo hubiera conocido esto, a lo mejor hubiera congelado mis óvulos y entonces otra historia hubiera sido, ¿no?
Ya cuando me lo dicen así… ¿sabes qué? pues hubieras hecho, hubieras decidido, hubieras tomado, entonces yo decidí… ¿sabes qué? no voy a tener hijos, ya lo había como pensado, ya lo había también… es muy importante, platicado con tu pareja decirle: mira, yo he decidido no tener hijos, ¿tú qué planes tienes para ti?
Para ti, no con nosotros, para ti. Si compaginamos, vamos a seguir con esto y si no, pues vamos a negociarlo o vamos a ver qué hacemos, pero tú dime desde ahorita que decidiste.
No, yo tampoco, pues no, no decido tener hijos, pero estaba padre tener la opción, ¿no?
De saber que puedes, entonces aquí ya me dijeron: con tus óvulos, sería más difícil, sería un tratamiento.
Entonces éste… yo si quería que hubiera sido con mis óvulos, entonces éste… pero ya será en otro tipo de circunstancias, que dices: híjole, pues la verdad pues prefiero no dar ese paso, pero yo también tenía otras prioridades; el trabajo, como bien dices soy workaholic, me gusta estar… ¿cómo se dice? como ajonjolí de todos los moles, aquí, en comunicaciones, en todo, ¿no?
Y aparte, yo me dedique mucho también a viajar, a conocer y por eso yo postergue la maternidad, pero creo que hubiera sido mejor si hubiera tenido los elementos en ese entonces para decidir ¿qué voy a hacer?, ¿qué tratamiento me voy a elegir?
O a lo mejor congeló mis óvulos y entonces ya estoy tranquila y entonces hasta los 40 podría haber hecho uso de mis óvulos y todas estas cosas que estás planeando y, de veras, yo te admiro muchísimo.
El hecho de haber ido a la universidad embarazada, digo, es muy loable, porque pues físicamente tienes muchas complicaciones o hay gente que no tiene ninguna, ¿no?
Pero tienes que ir a estudiar, tienes que ir a dar el cien de todo esto ¿no?
Pero afortunadamente ya tuviste pues este equilibrio, que supiste llevar ambas partes. Yo siempre digo equilibrio porque es como un malabar, ¿no?
Aquí tienes tu vida familiar, aquí tienes la vida laboral y tienes que estar en todo momento tratando de llevarlo de una mejor manera y llegar a tus metas, la familia, el esposo, sentirte contenta con lo que haces, continuar con esta pasión que yo siempre la veo reflejada en tu rostro… de, sabes qué voy a hacer esto y ya me voy a meter en esto, ya voy a involucrarme en este proyecto, ya voy a hacer locución, ya voy a estar con Suzuki… ya voy, ya voy, ya voy ¿no?
Entonces pues me da mucho gusto que lo haya sabido llevar.
¿Qué más nos puedes comentar al respecto?
¿Qué se te hizo como lo más difícil este trayecto?

María:
Pues mira, desafortunadamente creo que tenemos que trabajar mucho todavía en este país en esta parte de apoyo a las mujeres. A mí, bueno siendo como imagen en dos programas de televisión, me dijeron que no podía estar porque estaba embarazada.

Vanezza:
¡Qué fuerte!

Marian:
¡Qué mala onda!

María:
¡Si!
La verdad super injusto, me negaron oportunidad de poder estar participando en dos programas precisamente porque iba a estar embarazada, ¿no?
En esta parte de los coches ¿no? En el mundo automotriz también está muy marcado de hombres, mujeres y mucho más.

Vanezza:
¡Claro!

María:
Ay bueno, si tiene hijos mejor nos vamos con alguien que esté menos ocupada, ¿me explico?
O sea, creo que debemos trabajar como país todavía en esta parte de decir “oye, pues no porque sea mujer y tenga hijos no significa que va a ser un gran trabajo para la marca o para la empresa”

Marian:
¡No!
Que va a ser un impedimento para crecer profesionalmente, ¿no?

María:
Exactamente.
Sí, sí tenemos muchos más retos, porque al final, aunque tengas una excelente pareja que sepa, que los hombres deben de entrarle al 50% de la crianza, a pesar de esto si se te queda la carga más a ti. Simplemente porque amamantas, entonces debes de estar ahí con mucho más de tu tiempo y sin embargo debes de tener una nana o alguien de tu familia que te ayude para poderte salir a trabajar para poder combinar las juntas, para no estar, ¿no?
Entonces sí es un reto el combinar el tiempo y las actividades laborales.
Sí, sí lo es.
Siempre tienes que estar… yo decía que, si yo estaba apurada, después de tener un hijo no tienes tiempo ni para ir al baño, ¿no?
Eso es real.

Marian:
Todo cambia.
(ríe)

María:
Todo cambia, la vida te cambia por completo. Pero debes de ser lo suficientemente administrada, debes de tener esta administración del tiempo para saber que se puede con todo. Entonces, pues sí, sí es un reto el combinar el tiempo, es un reto el defenderte ante un mundo machista y misógino en el que todavía vivimos. Pero pues depende de ti el darte tu lugar y entonces ahí es cuando te das cuenta que sí se puede, que puedes terminar la maestría embarazada, que puedes tener los trabajos que sueñas, siempre y cuando seas firme en tu objetivo y que nadie te mueva de ahí.
Entonces si es un reto, doble reto para nosotras… entonces, pues ahora admiro mucho más a aquellas mujeres que todavía deciden tener dos/tres hijos, que digo ¿cómo le hacen?
Mis respetos, ¿no?

(Vanezza y Marian ríen)

Pero bueno, somos valientes y aquí andamos en la búsqueda también del crecimiento profesional y personal.

Marian:
¡Claro!

Vanezza:
Si, fíjate que era algo que platicaba con Marian, que me dijo “yo se lo voy a preguntar, ¿no?”
Ellos están en la etapa que, pues están saliendo de la carrera, están empezando esta vida laboral, están enfrentando la realidad en pocas palabras.

Marian:
Y que es difícil.

Vanezza:
Y Marian me dijo. ¿Sabes qué?, pues pregúntaselo, Marian.

Marian:
Si, algo que de hecho ya tenía en mente era que… bueno, ahorita ya hablando de todo esto y escuchando un poco más acerca de tu historia, es que la verdad me llama mucho la atención el cómo fue que fuiste decidiendo todo. Bueno, tomaste las decisiones en el momento, ¿no?
A mí, por ejemplo, esto que nos cuentas del hablarlo con tu pareja, saber realmente que es lo que quiere cada uno, como pueden como llegar a este punto en el que ambos cumplen sus metas y de alguna manera también esta parte en la que tú cambiaste las tuyas.
Tú tenías un objetivo, ahorita voy viendo que pues al final no sé si esto lo planeaste, si tu vida actual fue planeada… cuando tú te lo imaginabas a cierta edad decías: yo me quiero ver así cuando tenga esta edad, yo quiero para mí ser realizada es esta parte y cómo fue que realmente fue llevándote la vida o el plan, como tal de acción, para ser la mujer que eres hoy tan exitosa, tan empoderada y que fuiste aprovechando, pues todas las oportunidades.

María:
Yo creo que sin duda algo muy importante es el ejemplo que ves en tu casa y la educación que recibes, te marca la vida.
Yo vengo de un matriarcado muy fuerte porque mi madre sacó adelante a cinco hijos sola, sin un hombre alado.

Marian y Vanezza:
¡Wow!

María:
Y no fue una, si no dos veces.
Yo tengo cuatro hermanos que son de la primera pareja de mi mamá y después, yo soy hija única de la segunda pareja de mi mamá, ¿no? y de mi papá.
Entonces, pero al final pues siempre fallaron y nunca estuvieron y quién se hizo cargo pues fue ella y ella sola nos sacó adelante. Entonces creo que cuando vienes de un ejemplo tan fuerte, es cuando te das cuenta y dices: híjole, si ella pudo con cinco y sola, o sea…

Marian:
Yo también puedo.

María:
¡Claro que se puede!
¡Todo se puede!
Entonces creo que el ejemplo es muy importante y sin embargo Marian, algo que dices que me encanta y que sí me encantaría decirles a todos, es que mientras mejor trazado tengamos nuestro plan de vida menos te va a sorprender y esto te va a ayudar a llegar a tener la vida que siempre dijiste de chiquita que querías tener.
Yo de chiquita siempre dije “voy a ser locutora porque mi papá era locutor”.
Y siempre dije: ahí voy a llegar porque es mi sueño. Y porque yo lo veía frente al micrófono y decía “wow, yo quiero hacer lo mismo”. Y entonces no me quité de ahí, fui firme en mi objetivo, pero sin duda si esta sorpresa de salud no hubiera llegado a mi vida, tal vez ahorita, pues no sería mamá, no existiría Alondra, no tendría esta pareja, ¿no?
O sea, muchas cosas…
La vida, la vida es eso que sucede mientras estudias, mientras trabajas, entonces sí creo que mientras tengas un plan firme de vida, un proyecto de vida, que lo escribas, que pongas muñequitos en una hoja y que digas “yo me quiero ver así y así”… es más fácil.

Yo siempre fíjate, ojo, ¿eh?
No fue lo ideal, porque me di cuenta que dije “¿por qué dije esto?, pero desde que estudié la prepa, yo siempre dije “cuando yo vaya a la maestría, voy a ir embarazada”.
Ojo con lo que decretas.

Marian y Vanezza:
¡Wow!

María:
Porque igual, ya estando ahí, vomitándome…

Marian:
En examen…

María:
Comiendo galletas saladas mientras hacía el examen y escuchaba alguien hablar, ya perdida… dije “¿por qué lo decreté desde chiquita?
Pero si lo decreté, entonces ojo con este tipo de cosas que vas decretando en tu vida y ¡sí! tienes que hacer un proyecto bien marcado y hablar.
A mí me daba mucho miedo, lo confieso. Híjole, la he regado como con cuatro parejas. Nunca hablaba, nunca preguntaba “¿qué es lo que quieres de tu vida?, ¿a dónde vas?”.

Marian:
No, es que es muy difícil.
Aparte, no te quieres enfrentar a esa parte en la que te van a decir; “sabes que, yo quiero esto”, y al final es diferente y estas en la fase del enamoramiento, ¿no?
De, si vamos a estar juntos y qué padre… pero esta parte sí es muy complicada. O sea, la verdad esto que estás tocando creo que sí es algo muy difícil y que se debería de ver normal, ¿no?
Tendríamos que ser también como valientes para enfrentar esta parte.

Vanezza:
Yo creo que, en eso, tienes que ser como bien honesto, o sea, contigo y con la persona que tienes al lado, porque… bueno si, si da miedo efectivamente porque hay veces que no vas por el mismo rumbo.
También al igual que Marian, pues lo vives con otras parejas y dices “híjole, debimos haber hablado esto antes, ¿no?”
Pero, yo creo que es muy válido que vas aprendiendo en el camino que, si yo creo que decir la verdad, ser honesto contigo y con los demás, te abren mucho las puertas… a lo mejor en el momento duele que a lo mejor te puedan decir “pues yo no voy para allá” … pero si no lo haces, si no hablas en el momento, ¡vas a sufrirlo posteriormente!
Porque entonces sus caminos van a chocar y de todas maneras va a haber un descalabró. Entonces mejor hablarlo antes, negociarlo antes, a lo mejor no tiene que terminar… a la mejor dices “bueno en tal etapa vamos a hacer esto, en tales años hacemos esto”.
Tratar de planificar y tener las opciones que existen, conocerlas, para que puedas armar este patrón, esta vida, este plan de vida que te imaginaste, que a veces es totalmente diferente…
Pero bueno, tener una idea de a dónde vas, que quieres hacer.
Si es importante, como decía Marian.

Marian:
Si Vane, tienes toda la razón, es importante siempre ser honesta con una misma y con los demás.
Vamos a hacer una pequeña pausa, ¡no te vayas, en un momento regresamos!

(corte comercial)

Marian:
¡Ya estamos de vuelta!
Muchas gracias por seguir con nosotros, esto es Contigo en cada Ciclo.
En el capítulo de hoy nos acompaña María Sama y Vanezza Zita para hablar acerca del balance entre la vida profesional y personal.
No sé ustedes, María, Vane, pero por ejemplo yo ahorita las escucho y sé que siempre supieron hacia dónde querían ir, cuáles eran sus metas y yo, por ejemplo, yo ahorita, pues prácticamente voy terminando la universidad, estoy ingresando pues al ciclo profesional y platicando con mis amigas creo que muchas de nosotras aún no sabemos qué es exactamente lo que queremos. Creo que todavía estamos descubriendo que tal vez nos equivocamos de carrera, que estudiamos una cosa que no queríamos, incluso, pues otras mis amigas estamos como en esta parte en la que pues no sabemos exactamente qué es lo que nos va a traer la vida, ¿no?
Algunas me llegan a decir como de “tal vez yo sí voy a querer ser mamá pero si encuentro a la pareja ideal, si tengo la solvencia económica en ese momento”, algunos me dicen como de “no, yo quiero viajar por el mundo, quiero conocer y para mí eso es lo más importante”, pero creo que también otra parte en la que también estamos es en esta parte en la que creo que todavía estamos como descubriendo…estamos conociendo nuevas cosas, estamos iniciando proyectos, y que realmente pues es muy difícil como hacer tu plan de vida y creo que aquí algo que les quisiera preguntar las dos es:
¿cómo fue que, más bien, qué es lo que nos recomiendan para poder armar este plan?
O sea, ¿qué es lo que realmente se tiene que tomar en cuenta?, ¿cómo podemos nosotras descubrir que es lo que realmente queremos, lo que realmente, pues bueno, si, prácticamente qué es lo que realmente queremos nosotras para nuestra vida en un futuro? y ¿qué tendríamos que estar haciendo ahorita para poder; uno descubrirlo y después pues claramente pues llevarlo a cabo?

Vanezza:
María hermosa, échale ahí, de tu ronco pecho.

(ríen las tres)

María:
Pues, es muy buena pregunta Marian, porque yo creo que mientras más te metas a hacer cosas nuevas o extrañas, o sea, que estés abierta a nuevas experiencias, te va a permitir descubrir por donde ir, o sea el hecho de que ahorita, por ejemplo, tú te pongas este micrófono hermoso que tienes enfrente, te puede dar una idea de que a la mejor lo que te va a apasionar es estar frente al micrófono o hacer entrevistas, ¡pero lo estás haciendo!, ¡lo estás experimentando!, ¡lo estás llevando a cabo!
Cuando tú te cierras a nuevas experiencias, no permites tu autoconocimiento y tú descubrimiento, porque estás descubriendo qué es lo que te gusta hacer, qué es lo que te apasiona.
Yo les diría que se vayan mucho por esta… yo soy mucho de corazón, o sea, yo es lo que siento, no tanto lo que lo que razono.
¿Qué estoy sintiendo cuando estoy haciendo esto?, ¿qué estoy sintiendo cuando estoy en la universidad viendo números y aborrezco los números?
¡Entonces sé que por ahí no va!
Yo estudie comunicación porque aborrezco los números, soy pésima, no me gusta hacer un Excel y al final no te libras de ellos, ¿no?
En todos los proyectos tienes que hacer un cálculo para saber que tu proyecto realmente es redituable, entonces no te libras de ellos.

Marian:
Si, claro.

María:
Pero sí, si experimento y veo y siento que es lo que me está gustando y qué es lo que no.
Si yo estoy experimentando estas sensaciones horribles cuando veo números, pues sé que no va por ahí y no dejarte, también te pueden decir mil cosas, ¿no?
Tu familia, la exigencia que todavía existe de que “yo soy contador hija, tú tienes que ser contador”
¡Y qué horror!
O sea, y que espantó, porque lo que tenemos y lo que venimos aquí es a ser libres y a ser felices.
Y si a mí lo que me hace libre y ser feliz es lo opuesto a la contabilidad, aunque mi papá sea el más fregón, pues te tienes que alejar de ahí y seguir tu camino y defender tus ideas ¿no?
Yo creo que es atreverte experimentar nuevas cosas para descubrir qué es lo que te gusta, ser honesto contigo mismo, saber qué es lo que está sintiendo al momento de estar experimentando estas cosas y echarle ganas porque he visto también mucho… me ha tocado trabajar con mucho millenial, que los amo y los adoro, pero si digo “a ver chicos, ¿quieren llegar siendo el jefe de la empresa?” y, o sea, tienes que pasar por una serie de experimentos y trayectoria y cosas para poder avanzar, ¿no?

Bueno eso sería… yo pienso eso.
No sé tú, Vane.

Vanezza:
Efectivamente.
Donde es el latido, donde te lata, donde sientas esa pasión, síguela.
Se vale equivocarse, ¿eh?
No aciertas a la primera, hija, eso es muy importante decirlo.
De repente dices “bueno, es que creo que me equivoqué de carrera”, se vale cambiar.
Si en el transcurso conoces una persona, vas a un trabajo, ves algo que te apasiona, tómalo.
Se vale cambiar y prepararte para ello, también.
Bien decían, hay gente millenial muy preparada, que dice “sabes que, yo desde el principio sabía que quería”, hay gente que no. A veces tenemos 45 años y dices “todavía no sé qué quiero porque ya hice esto y el otro”.
Se vale cambiar, ¿no?
No siempre tienes el rumbo fijo y tus planes perfectamente hechos. Yo era mucho de planear, pero me di cuenta que también hay que fluir con la vida, o sea, hay veces que dices “pues bueno, a lo mejor como me toca cierto trabajo donde hay cosas que no me gustan hacer, a lo mejor tengo que hacer como decías, el Excel, tengo que presentar el reporte”.
Pues sí, en todo habrá cosas que te apasionen y habrá cosas que digas, esto no me gustaba, pero a lo mejor le encuentras el gusto o es un requisito para que tú sigas adelante.
Entonces es tomar de la vida lo mejor y hacer lo mejor que puedas. A lo mejor con elementos que no son del todo lo que tú quisieras, pero aprovecharlos, ¿okay?
Ahorita, no, tengo que hacer el Excel, tengo que hacer el reporte, pero voy a aprender a hacerlo para que lo haga así, para que salgan las cosas y fluyan y vean mi potencial y yo vea mi potencial, y a lo mejor es un tiempo en lo que llegó a dónde quiero ir, ¿no?
Las cosas, la vida es un reto, está siempre llena de retos y luego no sabes a dónde te van a llevar estas mismas experiencias… luego dices, bueno, en el trabajo que odiaba resulta que conocí una persona maravillosa y de ahí empecé a crecer profesionalmente.
A la mejor me jaló después y dije “me voy a trabajar con él o con ella, hacemos una empresa, hacemos un negocio” o con mi jefe que siempre me está regañando, no sabes cómo le agradezco porque aprendí muchísimo de él, porque más que regaños me dio experiencia y sí, yo estaba equivocada… o sí, a lo mejor ya aprendí a defender mis valores, aprendí a defender mis ideas de decir, “okay, a ti no te parece, pero no es que esté equivocada es que yo te estoy dando otra opción, ¿no?”
Entonces hay que tener también este valor de como dice María: defender tus ideales, tus proyectos y salir adelante, entonces, pues no vamos a encontrar todo planchadito. Ojalá así sea la vida, por eso hace rato les decía, enfrentarse a la vida real, porque en un libro toda la teoría está padrísima, te sirve de mucho, pero en la vida real es diferente.

María:
Yo agregaría algo Marian, que a mí me sucedió y es, yo me casé mucho con esta fórmula de las novelas de Televisa, me acuerdo que mi papá me decía; “es que no veas novelas, no te dejan nada, no sé qué”. Y si, me dejaron el pensar que el amor es como de novela, ¿no?

Marian:
Como cuentos de Disney también.
(ríe)

María:
Aha, que terminas casada con tus hijos, aquí el cuento de princesas, ¿no?
Y pues no, la vida no es así, es muy alejado de los cuentos de princesa, muy alejado de las novelas, pero sobre todo… creo que debemos de ir. Si ser rebeldes, perdón lo que voy a decir, pero ser un poco rebeldes e ir en contra de la sociedad, porque siempre te dicen “tienes que estudiar, tienes que casarte, tienes que después de casarte y tener hijos a la mejor ya estudiar un diplomado o una maestría, ¿sabes?”.
O sea, no existe un orden en la vida. Yo por ejemplo ahorita tengo a mi hija y todavía no me caso, me quiero casar dentro de 4 años que ella ya se acuerde de la boda, por ejemplo.
Entonces, o sea, son este tipo de cosas que a lo mejor pareciera rebelde, que vas contra la sociedad, pero que realmente estás haciendo tu vida y tu vida jamás va a ser igual a la de la de la otra.
Entonces creo que también eso sería para mí un mensaje importante que dar, no existe un plan perfecto de vida y cada quien va a tener su plan, que va a ser muy… mi plan de vida es muy distinto al de Vane y no por eso Vane es menos o más feliz y yo.
O sea, son simplemente dos tipos de vida, totalmente diferentes y que al final a las dos nos hace felices. Entonces, pues cada quien su vida chica, cada quien.

Vanezza:
Claro que sí, pero el chiste es que saques, que te haga feliz, que te llene… yo hablo mucho de esta pasión que te mueva, porque es así y en el momento en que yo decía “me apasiona conocer otros países, viajar, vivir en otros lados… no irme a tomar una foto en el Big Bang”, que no está mal, ojo, hay gente que dice “yo me voy a ir a tomar la foto y eso lo que a mí me llena”.
Perfecto.
A mí me llenaba hablar con la gente, hablar otros idiomas, conocer que comen, que piensan, crecer en ese aspecto y de todo eso, ver que quería para mí.
Entonces, pues defendí mucho eso, porque decían: ¿cómo siendo mujer, viaja sola?, ¿qué diablos vas a hacer allá?, ¿vas a estudiar?, ¿y tu vida? y ¿cuándo vas a construir una casa y cuando vas a construir una familia?
Lo estoy construyendo, de otra manera hice mi vida y la he disfrutado mucho. He tenido muchos tropiezos y descalabros como todo mundo.
Pero también son precios a pagar, que yo si he estado dispuesta a hacerlo, o sea, dices “bueno, yo tampoco, yo no estoy casada, yo vivo en unión libre, pero para mí eso es válido”.

Estoy con la persona que quiero sin algún papel o algo, pues, no me interesa tenerlo.
Yo vivo con la persona porque la amo, ¿no?
Y a lo mejor para alguien… “sabes que, yo sí quiero casarme vestida de blanco”, como dice la canción.
En Acapulco, o no sé Cancún, Las Vegas, yo que sé.
¡Está perfecto!
Si eso es lo que a ti te llena, eso es lo que tú querías, pero siempre de la mano también del proyecto de vida de la otra persona. O sea, a lo mejor está él también dice “bueno pues mi ideal es vivir en unión libre”. Entonces vamos negociando, a lo mejor nos casamos por el civil, no sé.
Pero tienes que hablarlo, y ser muy honesto contigo, no seguir… algo que a mí la vida me enseñó mucho es, no seguir, pues una cosa es acompañar a una persona y otra seguir ciegamente los ideales de esa persona. Hacer tu vida alrededor de una persona no está padre, no está padre.
O sea, no sé qué piensa María, pero sufres mucho porque no es tu vida, no es lo que tú quisieras y vives alrededor de una persona y cuando se va… ¿que quedó para ti?, ¿dónde quedaste tú?
Eso considerarlo a cualquier edad, ¿eh?
No sé qué piensas María.

María:
Si, si, sí. Es horrible.
Esto del amor, yo siempre digo que el amor… quiero decir una mala palabra, pero el amor te atonta, el amor te atonta. Quedamos en deuda con nosotros por darnos y está padre porque eso quiere decir que realmente tenemos la capacidad de amar y de verdad que yo siento que no todo mundo la tenemos, pero sí creo que siempre tu prioridad, ni siquiera los hijos, ¿eh?
Por ahí bien dicen, cuando tú vas en un avión, te pones primero tú la máscara para ponérsela después al niño… ¿cómo lo vas a salvar, si no te salvas tú primero? y esto aplica con la vida actual, O sea, yo también he tenido muy feas etapas con el papá de mi hija y entonces es… si no estoy siendo feliz aquí, ni por mi hija voy a estar al lado de una persona con la que no estoy siendo compatible.
Entonces siempre es ver por nosotros primero antes que por cualquier persona y cuando te abandonas por darte, pues quedas en deuda contigo mismo. Entonces sí, es fácil que suceda más si eres enamoradizo, como yo.
Pues también se aprende. Echando a perder también se aprende, yo eché a perder cuatro relaciones y ni modo aquí estoy.

(Marian ríe)

Marian:
Creo que esta reflexión, aunque suene muy cómica, muy divertida, nos hace entender que cada una de las situaciones que vivimos realmente nos dejan un aprendizaje.
Y bueno, creo que es tiempo de hacer una pausa, no se vayan, regresamos en un momento.

(corte comercial)

Marian:
¡Regresamos! Estamos muy contentas de poder seguir acompañándote este día con nuestras invitadas especiales, María Sama y Vanezza Zita, quienes nos están compartiendo su experiencia de vida para ayudarnos a encontrar un balance entre la vida profesional y personal.
Ahorita, la verdad es que me está encantando escucharlas porque creo que ambas tienen muchas cosas que aprender, ahorita digo perdón, que aportar…

Vanezza:
¡Y aprender!
Todavía seguimos aprendiendo.

Marian:
Si, la vida es constante aprendizaje.
Pero algo que me encanta es que, muchas veces, por ejemplo, nosotras en una edad más, pues abajo, no sé, que vamos empezando todo esto, creo que sentimos que todo está perdido, ¿no?
O sea, es como de “¿que estoy haciendo?, ¿adónde voy?” y por ejemplo de hecho ahorita tú, María, que comentabas esta parte de “no, ¡estudias contabilidad!” realmente yo estudié contabilidad, entonces justamente ahorita que lo decías me sentí tan identificada y yo creo que como muchas personas que también nos están escuchando, que a veces tienes un ideal. O sea, yo sí creía que bueno, voy a estudiar contabilidad, ¿por qué?, porque los contadores son necesarios, porque todo el tiempo van a recurrir las personas a un contador, ¿no?
Y al final, aguante toda la carrera, o sea, realmente yo decía “bueno, tal vez este semestre no me encantó… pero no pasa nada, sigo ¿no?” y ya cuando me repente voltee atrás, ya, pues yo ya estaba en el penúltimo semestre y fue como de “no, pues ya ahora ¿qué hago, ¿no? ya ni modo”.
Ni modo de decir, ya me di cuenta que no me gustó porque de hecho también lo piensas y es así es como de “bueno todo el esfuerzo que hicieron mis papás por pagarme esta carrera” y pues afrontas como estas consecuencias más bien, o sea, te toca ponerte, tomar la responsabilidad de decir “bueno, yo la elegí, estoy ya en este punto y la voy a terminar”.
Pero es bonito saber que al final, aunque tal vez, no sé, a veces sentimos que estamos equivocadas, pues vamos a aprender y vamos a llegar al lugar en el que nos sintamos bien, en el que sepamos que realmente como decías María, que ahorita nosotras nos sentimos así frente a un micrófono, o tal vez nos vamos a sentir así frente a una pintura porque nos gusta pintar y es por dónde vamos a ir y creo que esta parte de encontrar como realmente lo que nos gusta lo que nos apasiona me llena como de emoción al verlas y saber que realmente es así, no está nada escrito, claramente, cómo lo decimos en Elige tus Ciclos, la vida se forma de ciclos, pero eliges los tuyos.
Entonces esta parte, creo que me llena mucho, me encanta escucharlas y saber qué pues prácticamente no vamos mal, que cada quién está escribiendo su vida y que no está mal tampoco no saber en este momento que es lo que queremos para nosotras.

Vanezza:
¿Te digo una cosa?
Por ejemplo, en esto yo realmente estudié comunicación, yo me he dedicado a las relaciones públicas por muchos años, pero estudié comunicación. La cuestión aquí es que yo también tenía esta idea de la locución y eso, pero… ¡qué crees! que cuando tomé está área de relaciones públicas y me involucré en un trabajo donde era netamente relaciones públicas, le encontré un gusto que me apasiono, sabía que podía continuar comunicando, negociando, hablando con la gente, conociendo, es muy versátil esta carrera, le encontré un gusto que ya me quedé ahí, ¿no? Entonces y mira ahorita estamos haciendo algo un ejercicio de locución, pero mis inicios eran otros, pero vas encontrando, vas encontrando está pasión que te va moviendo ¿no?
Y eso es muy importante.

María:
Yo Marian, agregaría algo, cuando te escuché hablar, dijiste “aguante, aguante y aguante a estudiar contabilidad”, pero en el fondo yo sé que tú ya sabías que no tenías que estar ahí, porque para ti ya era aguantar, o sea, ya era un peso, ya no era algo que estuvieras disfrutando, digo, mis respetos porque valoraste el esfuerzo de tus papás, seguiste adelante a pesar de que ya sabías que no te encantaba, ¿no?
A la mejor para las próximas ocasiones escucharte más y saber “oye, esto no me está gustando y tengo que aguantar”, no tienes que aguantar nada en la vida, si es algo que no te está apasionando es también válido poner un alto a pesar de que a la mejor te puedas aventar broncas con tus papás, etcétera.
Pero sí escucharte y saber lo que estás sintiendo y decir no va por aquí, porque al final es tu corazonada, ¿no?
Te digo, mis respetos por qué continuaste y la contabilidad créeme, no está peleada a la mejor con la locución, sí ahorita es lo que te está apasionando. Porque al final la contabilidad te va a dar esta base sólida para saber manejar mejor los proyectos que se necesita muchísimo y que muchos no tenemos, entonces te va a poder complementar muy bien pero nunca va a ser tarde para para decir “ah, ya hice contabilidad, ahora puedo hacer esto, ¿sabes?”
O sea, ni, aunque tengas 50/60 años, o sea es muy padre poderte mover de área. Ya, ya estuve en esto, pues ahora voy a incursionar en otra cosa. Pues, mis respetos porque lograste también terminar esa parte, ¿no?
Y eso aplica también para una pareja, a veces aguantamos, aguantamos y aguantamos y se nos va la vida aguantando. Cuántas mujeres no conocemos que antes soportaban infidelidades, soportaban humillaciones, malos tratos y a pesar de eso 50 años duraba en su matrimonio. Entonces ahora es como “¿sabes qué? no tengo porque aguantar nada, no estoy siendo feliz con esto, me muevo de lugar, a pesar de que tenga hijos, a pesar de que sea complicado llevarla sola, la mejor me tengo que mantener yo sola y quitarme como la ayuda que me va a dar mi pareja”, pero nunca tienes que aguantar nada, o sea, siempre es un buen momento para moverte de lugar, tenemos esa capacidad en la vida y yo creo que eso es lo mejor de la vida. Hoy estamos aquí mañana podemos estar en París, entonces quitarnos ese miedo de movernos más rápidamente en esta vida, ¿no?.

Vanezza:
Yo, coincido totalmente. Eso de aguantar, no.
O sea, ya decir “bueno, pues me voy a quedar aquí”.
Por lo que saques, nada más, porque decidí que no quiero ser una mujer divorciada, una mujer que está tachada socialmente, porque lo he encontrado a mi edad y con gente joven, más grande que dice: no me consigo a mí misma como persona divorciada y prefieren estar ahí.
Entonces esto de aguantar, si habría que hacerlo a un lado.
No es lo mismo la resistencia, porque como bien me decía un amigo que es médico, por ejemplo, los problemas de infertilidad es una carrera de resistencia ahí la pareja tiene que aguantar ¿no? Muchas cosas como tratamientos como la duda, si voy a poder, no voy a poder, ¿cuándo voy a quedar embarazada y cuántos vamos a poder tener?
A lo mejor se puede solamente uno.
Pero también quiere decir mucho el amor y las ganas de tener a tu bebé, qué es tu meta. Entonces estás como habíamos dicho, siguiendo tu meta, cuál es la meta, quiero tener dos hijos o quiero tener a mi bebé pese a que a lo mejor ahorita no, no puedo, pero voy a informarme, voy a conocer las opciones que hay para hacerlo, hay muchas cosas ya en México, hay muchas opciones, hay muchos médicos, tratamientos que uno puede decidir, pero qué pues sí sería bueno conocerlo antes. Para que no les pase por ahí las cosas que aún no le han pasado, a qué dices “ay, qué crees, eso era antes, que debías haber tomado este tratamiento”.
Conocerlo, no se espanten cuando la gente les habla de fertilidad a la gente muy joven, pues si te espantas dices “bye, ahorita no me hables de eso, yo me quiero divertir”, si, solamente es como cuando te dicen “conoce métodos anticonceptivos”, si, conoce, para que puedas elegir. Si, no te asustes de temas de fertilidad, o sea conoce para que puedas planear tu vida, para que decidas, sabes que yo sí voy a postergar esto, yo no, a los 27 quiero esto.
Este tratamiento que me decías que te inyectaron, espantoso, que tuvo muchas secuelas y eso, o sea, ni siquiera lo he escuchado.
Y dices “si, pues es que así mi periodo no aparece en seis meses y ando libre”, pero qué precio voy a pagar posteriormente, ¿no?
Infórmense bien, conozcan, porque yo también tengo una amiguita que se puso estos implantes que te pones en el brazo y la pasó muy mal porque no tenía un previo de su examen de perfil hormonal y eso y le fue muy mal.
O sea, estaba jalándose los pelos y bueno, ya no podía ni trabajar ni nada. Y ese tipo de experiencias hay que conocerlas para no pasarla tan mal o disfrutar ¿no?
Que dices “bueno, voy a disfrutar mi embarazo”, hay muchas cosas que los hijos, María no me dejaron mentirte, te dan y que no hay algo que aquí parece ese amor, ese cariño, todas esas experiencias que estás viviendo ahora y eso que no soy mamá, pero que te lo dan los hijos, ¿no?
Entonces, pues sí, fórmense muchísimo para poder elegir, digo no quiero decir que se saturan de cosas de…25,000 tipos de carreras que hay, sino vean por dónde van, ¿por dónde van?
Que les está llamando la atención para que sobre eso vayan averiguando y ábranse como dice María, ábranse las posibilidades.

Marian:
¡Ay, me encanto!
Ya estoy muy motivada.

María:
¡Eso Marian, eso!

Marian:
No pero, algo que también, bueno, ahorita me he dado cuenta es que yo a ustedes las veo, las escucho y sé que son unas mujeres muy seguras de sí mismas, sé que la parte yo creo que del autoestima, la tienen muy bien trabajada y aquí, por ejemplo, lo que decían de separarte de una pareja independientemente de la edad de la que estés, creo que también tiene que ver con la seguridad, ¿no? Decir “yo voy a poder, puedo darle esto a mis hijos”, incluso también, o sea, en cualquier ciclo de la vida, por ejemplo, los estudiantes, esta parte de yo no saber si me iba, si ya no quería estar en mi carrera y decir “bueno me voy a ir a otra” y la parte de “y voy a poder en otra”, como esta duda, esta inseguridad que te genera y que al final era lo que te hace no moverte. O sea, la inseguridad de no confiar en ti, en ti misma, de decir “bueno, a ver qué va a pasar si hablo con mi pareja que yo tal vez sí quiero tener hijos y y mi pareja no quiere”, o al revés, ¿no? Y qué va a pasar si al final pues me dice que no y que voy a hacer sola, entonces creo que esta parte de la seguridad yo la veo muy importante y me gustaría saber ustedes ¿cómo la han trabajado y que consejos nos darían a nosotras para poder tenerla muy fortalecida y poder tomar estas decisiones tan importantes en la vida de cada persona?

María:
Bueno, yo te diría que en mi experiencia muchos hombres dicen: “no, yo no quiero tener hijos y yo no quiero tener familia, nunca me quiero casar” y terminan casados y con hijos antes que tú. Entonces muchas veces no coincide lo que dicen con lo que hacen, sin embargo, si te están diciendo desde un inicio, “sabes que yo no quiero tener hijos, yo no quiero casarme, no me gusta el compromiso”, porque sé que muchos, creo que cada vez conozco gente y cuarentones, o sea, de mi edad casi que no quieren el compromiso, etcétera.
Sí, creo que es un foco como decir: “bueno, él está buscando otra cosa que yo no estoy buscando”, me muevo de lugar antes de enamorarme, porque ahí vamos, o sea, nos está diciendo “no, yo no soy fiel”, a ver, yo también he dicho mucho, pregunten.
Si la gente es monógama o no, es decir, si les gusta nada más una pareja o no, también nos da miedo preguntarlo, pero es algo que hay que preguntar, no es modo de entrevista porque el hombre va a salir corriendo, ¿no? Pero si decirle que una plática de amigos y “oye, pues tú crees en la fidelidad o no, si para ti es importante la fidelidad”. Entonces si esta persona te va a decir a mí me gusta estar con varias personas, pues sal corriendo de ahí, ya no te enamores, no sigas en ese proceso de enamoramiento.
Eso por un lado y por el otro, pues sí, yo tuve muchos problemas de autoestima, yo me sentía gorda, yo me sentía fea, yo sentía que no hacía bien las cosas, que nadie me iba a contratar, que no servía para lo que hacía, incluso para relaciones públicas también tuve muchos dolores de cabeza con varios jefes, ¿verdad, Vane?
Vane fue mi jefa también un tiempo y en el proceso de aprendizaje de relaciones públicas yo también decía “yo no sirvo para esto, yo no sé escribir un boletín, soy pésima, no sé ni dónde va un punto, no sé ni dónde va una coma” y esto te baja la autoestima, van a ver diferentes eventos durante la vida que te bajen el autoestima, sin embargo creo que a mí lo que me ayuda a reforzarlo, es saber no soy perfecta, no me sale esto al 100, sin embargo, si estudió y le echó ganas y me pongo con la disciplina, mejoró y entonces eso eleva también mi autoestima.
Si a la primera no te sale algo y lo botas y dices “ay no, ya no sirvo para esto, bye” y te vas, tu autoestima va a ir bajando, pero si lo sigues intentando hasta llegar al punto en el que ya te sale bien las cosas, que no va a ser siempre a la primera, creo que todos nos desesperamos mucho y queremos todo muy rápido, pues también te ayuda a mejorar en esta parte, ¿no?
No sé, Vane.

Vanezza:
Si, definitivamente.
Y que no sirves para las RP de que estabas hablando, pero una idea que te crearon por ahí… y lo sé porque también trabajamos juntas.
Entonces, pues se dé que estoy hablando y de qué madera estás hecha, de la mejor, mija.
Pues sí, efectivamente hay muchas cosas que son errores, cierto. Pero vale la pena, vale la pena intentar. O sea, a lo mejor hay un punto en el que dices “si voy a desear, porque eso es lo que quiero” entonces defiéndelo, defiéndelo.
Me voy a preparar, voy a estudiar, voy a preparar un programa para mañana, pero voy a ver de qué voy a hablar, me voy a investigar eso, a lo mejor voy a hablar de productos biodegradables.
Entonces, pues ¿qué es eso? No voy a llegar a que nada más la otra persona me dé la información y bye, ¿no? O sea, tengo que averiguar de qué es, para que yo también pueda participar, para aprender. Entonces, este proceso que es la vida, disfrutarlo. Hay cosas que son muy duras, pero también hay que hacer la vida llevadera y como decías lo de los jefes, que a veces son terribles, sí. Pero también tenías compañeros que disfrutabas, qué decías “llegó y me hacen reír y platicamos de todo y hacemos la chamba a lo mejor hasta las 4 de la mañana, pero estamos cotorreando y chamba sale y somos responsables y se responde al cliente y lo hacemos de la mejor manera”, pero lo disfrutamos este proceso. A lo mejor con sus pros y sus contras. Yo creo que también eso es algo que la gente joven debe saber, no todo va a ser miel sobre hojuelas, la vida tiene muchos retos, tómenlos con amor y de la mejor manera y con la mejor actitud. Eso les va ayudar a salir adelante, ¿no?
Entonces, pues yo no sé si quieran agregar algo más, María. Te agradezco enormemente tu experiencia, créeme que enriqueces la vida de muchas mujeres con lo que nos estás platicando.

María:
¡Muchas gracias! Un placer compartirme, me encanta poder hacerlo y si deje algo en ustedes, lo agradezco infinitamente y que sean muy felices porque, hoy estamos, mañana, ¿quién sabe?
Y es lo que yo siempre digo, y ahora con esto del Covid, mucho más.
Creo que debemos de disfrutar cada día al máximo, sin pretextos y pues disfrutar mucho la vida, les mando un beso, los invito que me sigan en mis redes sociales.
Estoy como @samatips en Instagram y en Twitter. Y un placer platicar con ustedes. Marian, eres un angelote. Mi Vane, ¡qué gusto volver a compartir algo profesional contigo! y pues yo feliz, chicas. Y espero que haya podido aportar algo. ¡Muchas gracias!

Marian:
¡Al contrario, gracias a ustedes!
Un placer tenerlas en este capítulo del podcast Contigo en cada Ciclo y me encantará poder volver a escucharte, María, Vane, compartir más con ustedes y de verdad, muchas gracias por habernos acompañado el día de hoy.

Vanezza:
Al contrario, les mando un beso y un abrazo, cuídense mucho.

Marian:
Bueno, pues esto fue todo por hoy.
Les agradezco infinitamente por acompañarnos en este segundo capítulo del podcast Contigo en cada Ciclo.
No olvides, que, si quieres compartirnos tu historia, podrás hacerlo a través de nuestras redes sociales.
En Instagram y Facebook estamos como @eligetusciclos.
Nos encantará estar en contacto contigo, yo soy Marian Galindo y recuerda que la vida se forma de ciclos, elige los tuyos.

¡Consulta los artículos de nuestro Blog!

¡10 prendas básicas que no pueden faltar en tu closet!

¡10 prendas básicas que no pueden faltar en tu closet!

El secreto para siempre tener qué ponerte, crear un lindo outfit y sentirte hermosa todos los días es tener un closet con las prendas básicas necesarias, aquellas que nunca pasan de moda, que son para todas las edades y estilos, y que puedes acompañarlas con accesorios o prendas que estén en tendencia para crear un look mucho más elevado.

Aviso de Privacidad

COFEPRIS 203300201B0263

contacto@eligetusciclos.mx

Consulta previamente a tu médico, él es el único que puede recomendarte el anticonceptivo que más se ajuste a tus necesidades.

2021 Ferring Pharmaceuticals. El contenido de este sitio está orientado a audiencias fuera de los EEUU y el Reino Unido.